Parador de Alcañiz ***
El parador de Alcañiz es un parador de 3***, visitado en el invierno del 2012, a la vuelta del parador de Tortosa. Es un castillo-convento de los siglos XII-XIII, que acabaría reconvertido en sede de la orden de los calatravos.
Situación
Situado en lo alto de la ciudad, nada más llegar podemos dejar el coche en el parking exterior, que rodea todo él, esta vez no es necesario, ya que nuestras andaduras se reducen a la ciudad, perfectamente visitable a pie. La ubicación del parador nos ofrece unas excelentes vistas sobre Alcañiz, una lástima que el tiempo estuviera acompañado de una neblina.
Lugares de interés
El parador, conocido como Castillo de los Calatravos, es verdaderamente impresionante, del que destacan sus torres, en la imagen podemos ver una de ellas adosada a su exterior. La puerta de entrada que nos conduce al interior nos lleva a otro enorme patio . Al fondo se puede distinguir la torre del homenaje y la capilla. La primera recomendación es hacer una visita a sus Torre del homenaje, se puede disfrutar por un módico precio de la visita guiada ofrecida por el propio parador, la cual resulta enormemente instructiva, destacando tres partes en la torre, la de arriba en la cual se desarrolla un combate entre moros y cristianos, la del medio muestra el Encuentro de los tres vivos y los tres muertos y la de abajo narra la infancia de Jesús: la Anunciación, la Visitación y la Natividad. Desde esta zona podemos disfrutar de una estupenda vista del patio interior.
Realizada esta primera visita, a escasos metros se encuentra la Casa consistorial, construida en su plaza Mayor, formando ángulo con otro monumento no menos importante, la Lonja Gótica. Y, también junto a estos se encuentrá la excolegiata Santa María la Mayor..La oficina de turismo ubicada al lado, se pueden sacar entradas para visitar los pasadizos de Alcañiz, la visita comienza a partir de una escalera a la cual se accede desde el interior de la propia oficina. Esta visita nos permitirá conocer como se conservaban los alimentos en la época, la visita acompañada de medios audiovisuales nos mostrará salas a varios metros de profundidad dónde se almacenaban los alimentos a conservar, siendo el hielo la mezcla de nieve con paja, La sala tendrá en uno de los extremos la zona por dónde se introducía la nieve y si nos fijamos veremos varios canalones en el suelo para faciliar el deshielo de la nieve que será conducida a un depósito, con el fin de no permitir la putrefacción de los alimentos por agua estancada procedente del deshielo.
Perfectamente visitable a pie, a unos 15 minutos andando, podemos acercanos como curiosidad a contemplar la Fuente de Santa Lucía, conocida popularmente como Fuente de los 72 caños, no demasiado bien conservada en la actualidad, alguno de los caños no presenta agua o se encuentra deteriorado.
Gastronomía
Provenientes del parador de Tortosa, en el cual nos han dado un vale-descuento para gastar en cualquier otro parador, optamos por comer en el parador. Nos atrevemos con:
Ensalada aragonesa.
Ternera lechal.
Ternasco.
Arroz con leche
El frio es intenso y no apetece descubrir Alcañiz de noche, así que optamos también por cenar en el parador, eso sí, mucho más ligero.
Torta de queso.
Jamón D.O. Teruel.
Pan con tomate.
El segundo día la comida me permite disfrutar de un plato muy contundente, los huevos a la alcañizana, que como se suele decir resucita a un muerto. Los huevos a la alcañizana consisten en unos huevos escalfador acompañados de lomo, longaniza y jamón, casi ná.
Tabla de quesos.
Solomillo de ternera.
Huevos a la alcañizana.
La cena también es en el parador, no tenemos ganas de complicaciones, aunque no acertamos debido a que algunos platos son contundentes para la noche:
Torta de pimientos rojos.
Salteado de verduras.
Sopa de ajo, con huevos escalfados y jamón.
Todos los días nos han parecido los platos muy acertados tanto en cantidad como en calidad.
Recomendaciones
En esta ocasión no puedo aconsejar el embutido, que a pesar de la referencias no lo hemos encontrado muy apetecible, salvo el jamón de la zona que tiene fama.
El vino
Este manjar merece un capítulo especial. Siempre recomiendo lo mismo, vino de la zona, hay grandes sorpresas, y quiera Dios que una me llevé. Mi descubrimiento no fué en una vinacoteca ni nada de eso ni me asesoró nadie, había una oferta de 2×1, y menudo acierto.
Señorío de la Obra, 2 botellas 10 €
El retorno
Ha sido gratificante la visita a Alcañiz, para los amantes del motociclismo, está a un paso Motorland. Ahora sólo queda coger el vehículo ya que estamos a unos 400 kms. de la capital.